Aún recuerdo aquella madrugada: eran las 5 de la mañana y tan sólo estaba Nala en el umbral de la puerta, mirándome intrigada y sin saber que ya no volveríamos a dormir juntas nunca más. Ese día cometí la que fue, y sin duda será, la mayor de las locuras de mi vida... pero en todos los días que han pasado desde entonces jamás me he arrepentido... ni me arrepentiré.
Dejé una habitación llena de recuerdos y una casa que siempre será mi hogar, para trasladarme a 3.000 km y buscar la otra mitad de mi corazón. Encontré eso y mucho más. Ahora tengo dos familias, alejadas en la distancia, pero unidas en mi interior.
Sé que tomé la decisión adecuada, lo demuestran el pequeño anillo que está en mi mano derecha y la sonrisa con la que despierto cada mañana.
Han pasado 4 años intensos, inolvidables y que, sin duda alguna, no son más que el principio de una historia que escribiremos día a día.
Gracias a todos los que me demostrasteis vuestro amor diciéndome que no me marchase, a los que me animásteis a dar el paso y sobre todo a ti cariño, por hacer que todo haya valido la pena.
Dejé una habitación llena de recuerdos y una casa que siempre será mi hogar, para trasladarme a 3.000 km y buscar la otra mitad de mi corazón. Encontré eso y mucho más. Ahora tengo dos familias, alejadas en la distancia, pero unidas en mi interior.
Sé que tomé la decisión adecuada, lo demuestran el pequeño anillo que está en mi mano derecha y la sonrisa con la que despierto cada mañana.
Han pasado 4 años intensos, inolvidables y que, sin duda alguna, no son más que el principio de una historia que escribiremos día a día.
Gracias a todos los que me demostrasteis vuestro amor diciéndome que no me marchase, a los que me animásteis a dar el paso y sobre todo a ti cariño, por hacer que todo haya valido la pena.
4 comentarios:
Que voy a poner que no sepas... deseo con toda mi alma que con tu "locura" hayas encontrado lo que más buscabas, ser FELIZ. Ese día yo creía que me iba a morir, mi pitufa se marchaba, lo que días atras me contaba se convertía en realidad, que no era un mal sueño, que era cierto, se iba, se iba muy, muy lejos, pero buscaba ser dichosa, y por encima de todo es eso lo que yo siempre he querido, su felicidad.
Hoy después de 1.460 días, en muchas ocasiones se me llenan los ojos de lágrimas recordando ese momento, y también se me llenan los ojos de lágrimas cuando veo las fotos en la que estoy contigo, del brazo, vestida de novia y sabiendo que ese día comenzabas a escribir el libro de Tu vida titulado FELICIDAD.
Te quiere. Aita
no hay que ponerse melodramaticos. ahora tenemos un lugar de veraneo donde no hay que poner el hotel.
Mila zorionak y que 4 se convierten como poco en infinito. LA agente de viajes
Han pasado 4 años, y para mí que
más intensos que los 23 anteriores
a que sí, espero que sigamos com-
partiéndolos un poquito. izeko
Al leer tu comentario, la emoción se hizo la dueña de la situación. Recordé aquellos momentos como si los estuviera viviendo otra vez. Fuí incapaz de escribir nada. Después, al leer a tu aita, ¡otra llorera!...Ahora, después de tu "bronca" por no contestarte, te lo aclaro. ¡Gracias por ser féliz!. Resultaría insoportable tu ausencia sin esa certeza.
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